La Comisión Europea ha recomendado la apertura de negociaciones de adhesión a la UE, con Ucrania y Moldavia, y la concesión del estatus de candidato a Georgia.

 

Arnaud Rousseau, presidente de la principal organización agraria de Francia, la FNSEA, se «ha tirado a la piscina» y ha dado la opinión de su organización, sin ambages, sobre la entrada de Ucrania en la UE: «Sería una catástrofe para el sector agrario comunitario».

 

En una entrevista concedida a los diarios del grupo Ebra, ha dicho: “En el contexto de la guerra, es muy difícil comentar sobre este tema porque inmediatamente se te acusa de no apoyar a Ucrania. Pero sólo desde el punto de vista agrario, la entrada de Ucrania en la Unión Europea sería una catástrofe para la agricultura europea

 

Ha insistido en que la agricultura ucraniana no es comparable con la de la UE. Por un lado, por el tamaño, ya que solo el sector ucraniano equivale a la cuarta parte del comunitario. Es especialmente fuerte en cultivos extensivos y avicultura, con un tamaño de explotaciones muy elevado (la explotación más grande de Ucrania tiene 700.000 hectáreas y la de Francia, 2.000). Por otro lado, tiene una normativa de producción mucho menos exigente que la de la UE.

 

Paralelamente, el ministro francés de Agricultura, Marc Fesneau, viaja hoy a Ucrania invitado por su homólogo ucraniano, Mykola Solsky. Este viaje es una muestra del apoyo francés a Ucrania.

  

Ya en una ocasión, cuando la FNSEA denunció ante el ministro las cuantiosas importaciones de pollo ucraniano que entran en Francia, que están hundiendo al sector avícola francés, ya que se producen en condiciones mucho menos exigentes y entran sin aranceles, lo que las hace muy competitivas, Fesneau respondió diciendo que no iba a hacer nada porque no quería mandar señales hostiles a Ucrania.

Fuente: Agrodigital